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Cuchillo

Cuchillo

Número de inventario: 6872. Calzada de Oropesa (Toledo).

Hierro, madera. 32,5 x 14 cm.

La herrería y fundamentalmente la de corte, representa uno de los oficios más importantes por el perfeccionamiento constante de la técnica y el mantenimiento de las tradiciones. Cuando en el resultado final de la pieza se mezclaba el trabajo de dos artesanos, era normal que la forma de pago fuera el trueque. En este tipo de relaciones entre artesanos, la del herrero y el carpintero eran de las más intensas y en muchas ocasiones trabajaban a medias (B. Torres, 1993: 29).

La pieza nº 6872 está compuesta por una hoja rectangular de sección triangular irregular y afilada en uno de sus lados mayores y un mango torneado. Si nos fijamos en el lado que no está afilado, vemos restos de golpes. Por lo visto el filo no era suficiente para cortar o romper determinadas zonas del animal, por lo que se recurría a golpearlo con otra herramienta de madera, como un martillo para poder romper la parte en cuestión.

Muchos herreros dejaban su sello en las piezas que realizaban con fines publicitarios o simplemente por dejar su huella. Aquí vemos tres M en la parte opuesta al filo.

El consumo de carne conlleva todo un proceso de fabricación, empezando por la preparación del animal en la forma de alimentarlo, la matanza, el descuartizado, la limpieza y posterior manipulación, dependiendo si la carne se va a consumir como embutido o fresca.

Para la elaboración de embutidos, entre otras cosas, es necesario picar la carne en trozos más o menos pequeños según para lo que vaya a ser utilizada y para ello se utilizaban este tipo de cuchillas. A veces aparecían hasta cuatro iguales y unidas en paralelo, para obtener una mayor rapidez. Después aparecieron las máquinas picadoras que se podían accionar con el brazo, para un uso casero, o movidas por fuerza motriz mediante electricidad para un uso industrial (C. Sanz Egaña, 1928: 23).

Cuando el animal se descuartiza se necesitan muchos útiles capaces de romper huesos duros. Por ejemplo, en un cerdo se llegan a distinguir hasta 27 regiones diferentes, entre cabeza, cuello, espalda o paletilla, pezuña... que hay que separar y que presenta una variada gama de resistencia a su corte (C. Sanz Egaña, 1928: 23).

VSC

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