23/10/2019
Mañana jueves 24 de octubre a las 19.30 horas, el Museo Nacional de Antropología inaugura la exposición temporal ‘Ganges, el río sagrado. De Calcuta al Himalaya’ del fotógrafo murciano Luis Sáez. Se trata de la tercera etapa del ciclo ‘Istán, en el techo del mundo’ organizado por el Museo Nacional de Antropología y que incluye las exposiciones ‘Nómadas de Altái. Vida en las estepas de Asia Central’ –prorrogada hasta el 3 de noviembre- y ‘La morada de las nieves’.
El río Ganges es el hilo conductor de esta exposición, en la que las fotografías de Luis Sáez muestran al visitante la diversidad social, religiosa y espiritual de uno de los países más poblados y llenos de contrastes del mundo. Luis Sáez realizó una peregrinación o yatra durante tres años de viajes, entre 2013 y 2016. La muestra se completa con una selección de representaciones sagradas de la India de la propia colección del museo en un montaje tridimensional.
Luis Sáez y el río Ganges
Las orillas del río Ganges son el escenario de innumerables rituales religiosos y mortuorios, con el bullicio y el caos propios de una de las zonas más pobladas del planeta. Más de cuatrocientos millones de habitantes viven junto a él, y hacen del Ganges una figura omnipresente, su dios, su fuente de vida, su último destino. El fotógrafo realizó varios viajes en los que remontó el río desde su desembocadura en Calcuta hasta las fuentes al pie de las cumbres más altas de la imponente cordillera del Himalaya. Esta exposición presenta su testimonio incluyendo varias imágenes sagradas indias de la colección del museo.
El viaje, reproducido en la exposición, parte de ‘la ciudad de la alegría’, Calcuta, donde se encuentra inmediatamente el contraste característico de todas las ciudades de la India, y que inmediatamente tanto llama la atención de quien llega allí por primera vez, entre la enorme pobreza hacinada en sus barrios y calles y una población llena de vida y de una gran espiritualidad.
El yatra o peregrinación se prolonga en otras seis paradas:
Y el viaje concluye en los templos de Gangotri, a pocos kilómetros del glaciar considerado nacimiento del Ganges, el Gaumukh; y en Badrinath, en la frontera tibetana.