Los Planes Nacionales de Patrimonio Cultural son instrumentos pluridisciplinares de gestión integral, con participación de diversas administraciones y otras entidades públicas y privadas, que fomentan el conocimiento y que programan actuaciones de conservación preventiva, intervenciones de restauración y acciones de difusión, con el fin de proteger los bienes culturales y permitir su acceso y disfrute por parte de la sociedad, a través de los siguientes objetivos: