La amplitud y repercusión de los objetivos del Plan es aplicable a la totalidad del patrimonio y tiene un enfoque de transversalidad respecto a otros planes nacionales y cualquier otra iniciativa y esfuerzo para la conservación del patrimonio cultural. Por ello, se pretende lograr una amplia repercusión y una mejora importante en los aspectos clave de la protección activa de los bienes culturales, como son:
El Plan Nacional de Conservación Preventiva se concibe como un instrumento de gestión con enfoque interdisciplinar y carácter de síntesis e integrador, como corresponde a los distintos ámbitos de gestión y técnicos de los que depende la conservación del patrimonio cultural. Su objetivo fundamental es:
Los objetivos de los estudios y acciones relacionadas con los bienes inmuebles requiere focalizar estos esfuerzos en el desarrollo de modelos organizativos entre los diferentes agentes, de manera que se integren las tareas de seguimiento y mantenimiento bajo criterios y métodos de trabajo definidos y que permitan un control adecuado de los riesgos de deterioro de estos bienes. En el caso de inmuebles y conjuntos contemplados en los distintos planes nacionales, se coordinará la planificación para la necesaria introducción del principio de conservación preventiva y se analizarán los instrumentos de gestión y actuación existentes como los planes directores, los planes de especial protección y otros instrumentos creados para la conservación del patrimonio cultural.