Dada la delicadeza de los materiales, y con el fin de asegurar su conservación a largo plazo, las prendas de indumentaria se muestran siempre en vitrinas, en las que se controlan al máximo posible los factores medioambientales: humedad relativa, temperatura, contaminantes e iluminación. Aun así, las piezas no pueden permanecer demasiado tiempo expuestas, por lo que dichas vitrinas se cambian con asiduidad. Estas condiciones de conservación no solo afectan a los textiles, también al papel, lo que exige en museos de nuestra tipología un esfuerzo extra para conseguir que el legado siga indemne y disponible para el disfrute de generaciones futuras.
La colección que alberga empezó a tomar forma hace un siglo este 2025, motivada por el interés existente entonces hacia el estudio y la preservación de las diversas manifestaciones culturales de la España tradicional, avocada a la extinción ante el avance del mundo moderno.
En 2004 se refunda como Museo del Traje. Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico, lo que supuso un giro de 360 grados al desviar el foco de atención del objeto tradicional al objeto de moda. Este 2025 celebramos el centenario de la Exposición del Traje Regional que supuso el nacimiento de las colecciones de la institución, y el foco vuelve a estar en la tradición de nuevo. Diferentes profesionales de la artesanía textil y la creación de moda intervienen las vitrinas proponiendo diálogos y conexiones en estos cien años de historia. El proyecto Intersecciones forma parte de las actividades para conmemorar el centenario del nacimiento de las colecciones del Museo del Traje.
La afluencia de donaciones desde entonces, así como la incorporación de importantes colecciones mediante su adquisición por parte del Estado, han permitido mostrar a través de la exposición permanente una historia del traje y sus transformaciones a lo largo de los tres últimos siglos. Ese fondo de armario, siempre en crecimiento, ha facilitado también la labor de investigadores externos y profesionales del diseño, y por supuesto ha obligado al propio Museo a reflexionar sobre sus objetivos y su proyección hacia el futuro.
Una cuestión sobresale todavía en el desempeño cotidiano de la actividad del Museo: ¿qué es la moda? La moda indumentaria ha sido el ejemplo más visible de la internacionalización de las costumbres desde que en el siglo XVIII se puso en marcha la maquinaria de las manufacturas francesas del lujo. El traje es la representación primaria de la forma de vivir y pensar propia de cada cultura, expresión paradigmática de las particularidades locales y al mismo tiempo un elemento que nos define como humanos frente al mundo animal.
El discurso expositivo reune las múltiples perspectivas desde las que se puede abordar el campo de la indumentaria. Pero, simultáneamente, aborda también la introducción de nuevas prácticas y formas de consumo asociadas a los cambios impulsados por los mecanismos de la moda. Estos cambios, más allá de afectar al estilo indumentario, aparecen en todo tipo de producciones que se vinculan de manera más o menos directa a la transformación de las costumbres e incorporan las estéticas en boga en cada contexto. Así, la intención de la exposición es explorar la correspondencia existente entre las formas y conceptos expresados en el traje y los valores emanados de otro tipo de objetos.Salto de línea Salto de línea La museografía con referencias específicas y con carácter local, vinculando el desarrollo de la moda con los acontecimientos que más han repercutido en la historia de España. El arco cronológico que abarca la exposición, cubre un ciclo que es el del desarrollo técnico, científico, industrial, comercial y urbano, cuyo inicio coincide en España con el cambio de dinastía en el siglo XVIII. Uno de los objetivos de la exposición es además de visibilizar la intensa acción de la moda sobre la mujer, analizar los usos de moda masculinos, a fin de revisar el verdadero papel de la moda en el cambio social.
Las amplias colecciones adscritas al Centro de Investigación del Patrimonio Etnológico, podrán recuperar así su protagonismo, entendidas no ya como vestigios de tradiciones en peligro de extinción, sino como manifestaciones del cambio cultural en cada momento histórico.
Para facilitar la labor didáctica de la exposición, ha sido dotada de dos recursos virtuales para descubrir, no solo la información individualizada de cada pieza, sino todo un universo de contenido específico ordenado por áreas: con glosario, textilteca, listas de reproducción musicales y vídeos, entre otras herramientas para completar la función educativa de la exposición permanente.
Visita virtual exposición permanente
Viaje a través de la moda.Salto de línea Descubre el Museo del Traje y mucho más.
Visita virtual una experiencia única
En esta visita en súper alta resolución y tour de bienvenida en el que conocer la esencia de la visita.