Cantabria, ca. 1920
El traje consta de saya fruncida y delantal de peto, ambos de fino paño morado y decorados con aplicación de bandas de terciopelo morado, y chaquetilla del mismo material, corta, ajustada con ballenas y ornamentada con pasamanería metálica y botonadura de acero plateado. Se completa el conjunto con unas medias estriberas de lana en color crudo, que se pueden calzar con escarpines –especie de zapatillas de paño sin suela- encima, y sobre estos, las albarcas de pellejo o chátaras, muy escotadas, trenzadas en el borde y con trabilla en el centro de la puntera, por las que pasan las cintas ataderas de cuero o estuérdigas.
Es un traje icono de oficio; una especie de uniforme, en este caso de nodriza. Las nodrizas amamantaban a los hijos de las familias acomodadas, generalmente en las ciudades, y pasaban hasta dos años con ellas, habiendo tenido que abandonar a los suyos en sus lugares de origen. Eran especialmente apreciadas y cotizadas las pasiegas, aunque también las segovianas.
Inventario: MT005200B, MT005202-04, MT005216 y MT083397