Escritorio

Primer cuarto del siglo XVII

Castilla

Barrotado, atornillado, torneado, fundido y terciopelo

66,50 x 108 x 44 cm

Nº Inv. 30068

Los escritorios eran una de las piezas fundamentales del mobiliario español en los siglos XVI y XVII, como derivación del arca medieval, empleado para guardar documentos y objetos de valor pequeños. Para ello contaban con diversas gavetas, unos cajones distribuidos en el interior del mueble, a las que se accedía al bajar la tapa frontal.

Realizado en madera de nogal, consta de tapa frontal abatible que permitía acceder a las gavetas, organizados en tres calles de cinco gavetas en el caso de las laterales, y contando con otras tantas en la calle central. También son interesantes las asas laterales, que permitían transportar el mueble, como exigía la vida itinerante de la corte y aristocracia desde tiempos medievales, y que perduraron como elemento decorativo aun cuando se pierda el carácter móvil del escritorio.

El escritorio utiliza como soporte un mueble llamado “pie de puente” o “pie abierto” (inv. 30069), datado también en el siglo XVII, siendo desde el siglo anterior una pieza muy común del mobiliario castellano. Asimismo, desde el siglo XIX será considerado un mueble típico español, y recibirá el interés de los estudiosos en plena corriente historicista.