Historia de las colecciones

El origen de las colecciones del Museo Sefardí se remontaría al año 1911, cuando el marqués de la Vega Inclán (1858-1942), Comisario Regio de Turismo, proyecta crear en la Sinagoga del Tránsito un pequeño Museo de arte mudéjar y una Biblioteca de Estudios Hebraicos. En el año 1915 se trasladan a la sinagoga, a propuesta de la Junta Facultativa de Archivos, Bibliotecas y Museos del Ministerio de Instrucción Pública, unas lápidas con inscripciones hebreas procedentes del antiguo cementerio judío de Toledo. Estas piezas se encontraban en el Museo Arqueológico de la ciudad, que estaba cerrado al público.

Tras la creación oficial del Museo Sefardí en 1964, definido como Museo Nacional de Arte Hispanojudío en el Decreto de fundación, la colección se inicia con piezas solicitadas en depósito a distintos museos de España así como a particulares.

A partir de la década de 1980 el museo comienza una política de adquisición de fondos para poder disponer de una colección propia, además de realizar una campaña de producción de copias de objetos judíos existentes en España. Asimismo, se incrementa la compra de fondos bibliográficos en lengua hebrea, a la par que se empieza a formar una biblioteca básica en materias relacionadas con el Museo.

Entre los años 90 e inicios del siglo XXI, la colección sigue aumentando gracias a varias vías. Entre ellas cabe mencionar las compras del Ministerio de Cultura y la recepción de numerosas donaciones, como las de la Asociación de Amigos del Museo.También se reciben nuevos préstamos de bienes arqueológicos e históricos procedentes de instituciones nacionales e internacionales, así como piezas ceremoniales propiedad de familias sefardíes, que permiten completar la colección con la historia viva del pueblo judío.Por último, es necesario mencionar los ingresos procedentes de las excavaciones del museo -la última de ellas finalizada en 2020- que aportan una valiosa información sobre el entorno arqueológico de la sinagoga.