«El hombre es una pompa de jabón»

Niño dormido sobre calavera

Niño dormido sobre calavera. Anónimo, siglo XVI.

Este motivo, «Homo bulla est», viene de la Antigüedad, de Lucano y Varrón, y llegará a través de los Adagia de Erasmo, de donde pasa a las artes plásticas. La alegoría despliega una amplia gama de ideas fúnebres: el hombre, en su paso por la Tierra, es insustancial, frágil, de brillo y vida instantáneos, y se deshace sin dejar rastro. En esta variante del tema, la fugacidad, adopta la metáfora del niño (inspirado en los putti o en los cupidos) que duerme con placidez inocente recostado sobre un cráneo, una iconografía habitual del arte español. Su mensaje es directo: el hombre debe mantener en la memoria la calavera de la infancia, es decir, recordar que nació solo para morir.

Subir