El Museo nacional de Antropología conserva importantes colecciones de plumaria procedentes de América, África y Asia, aunque la mayor parte procede de los grupos indígenas de la Amazonía, donde los adornos con plumas son uno de los elementos más característicos de su cultura material.
Como arte plumario se clasifican los objetos realizados con plumas de aves donde se combinan distintos colores y formas en función de las concepciones estéticas de los diferentes grupos.
Los objetos de plumaria, aunque identificados fundamentalmente como adorno personal, están relacionados con mundos complejos de mitologías y leyendas que prescriben su función y significados. Nos aportan información sobre el individuo, su edad, género o posición social, estando su uso reservado, en algunos casos, a la autoridad política o religiosa.
La utilización de estos objetos ha sufrido diferentes modificaciones debidas a la escasez de recursos naturales, la desaparición de especies o la protección de aquellas en peligro de extinción, aspectos que van unidos al proceso de evolución, transformación y cambio en las culturas tradicionales.