Los conocidos como Decreta de León del año 1188 y su tradición textual son de momento la prueba documental más antigua en la que se documenta la presencia del pueblo en la toma de decisiones a nivel del reino junto al monarca y los estamentos privilegiados de la época, como eran la Nobleza y la Iglesia, representada por los obispos y abades de los principales monasterios, investidos de poder temporal y espiritual la mayor parte de ellos. Los Decreta de 1188 están compuestos por diecisiete estatutos o decretos, sancionados por el rey Alfonso IX de León (1188-1230) con la finalidad de establecer la paz del reino, entonces compuesto por los territorios de Galicia, Asturias, León y las Extremaduras.
Salto de línea No conservamos el texto original de los Decreta de 1188, sin embargo en los Archivos y Bibliotecas españoles se conserva una rica tradición textual mediante copias contenidas en documentos diplomáticos medievales y en textos manuscritos modernos. De este conjunto, la propuesta para el Registro Memoria del Mundo de 2013 se ha seleccionado cinco de los textos más relevantes como son los conservados en el Archivo Histórico Nacional, el Archivo de la Catedral de Orense, la Biblioteca Nacional de España y la Biblioteca Capitular y Colombina de la Catedral de SevillaSalto de línea