Fueron dos sus grandes amistades: fue un gran amigo del actor y cantautor alcoyano Ovidi Montllor, que compondría algunos temas inspirados en poemas de Vicent Andrés Estellés y del escritor Joan Fuster. Cuenta Pau Alabajos, en su obra Vicent Andrés Estellés: La veu d'un poble -principal fuente bibliográfica de esta biografía-, la bonita anécdota de que Fuster “bautizaría” a Camina Andrés, ya que sus padres querían hacerlo en valenciano y el sacerdote no hablaba la lengua. Como solución, Fuster se ofreció como traductor.
Además, no se puede entender a Estellés sin hablar de su profunda admiración por Ausias March. Tal era el modo del que Estellés hablaba habitualmente del poeta del siglo XV, que un día que llevó a su hija a conocer la tumba de éste, la niña se echó a llorar. Al preguntarle su padre el motivo de su llanto, ella le contestó: “Es que era muy amigo tuyo, ¿no?”.