El patrimonio cultural es lazo de unión entre las personas y contribuye a crear sociedades más cohesionadas. Impulsa el crecimiento y el empleo en las ciudades y regiones y constituye el núcleo de los intercambios de Europa con el resto del mundo. Supone un gran potencial para Europa, pero debe aprovecharse mejor y este año puede ayudar a conseguirlo.
El Año Europeo del Patrimonio Cultural ofrece una oportunidad única para reflexionar sobre la mejor forma de abordar el potencial y los retos del sector. ¿Cuál es el mejor modo de fomentar el gran potencial del patrimonio cultural? ¿Cómo podemos maximizar sus beneficios sociales y económicos? ¿Cómo podemos proteger y gestionar mejor nuestro patrimonio cultural, velando al mismo tiempo por que las personas de todos los orígenes tengan acceso a él?
Para ello, el Año Europeo promueve formas inteligentes de preservar, gestionar y reutilizar el patrimonio europeo.