(1) Licencia arzobispal concedida a la marquesa de Tolosa para poseer y leer libros prohibidos por el Santo Oficio (1793)
María de la Concepción de Pinedo González de Quijano, III Marquesa consorte de Tolosa, destacó por ser una mujer absolutamente erudita y relacionarse con los círculos intelectuales más selectos de la segunda mitad del siglo XVIII.
En 1782 le fue concedido el permiso personal para tener y leer la Biblia en lengua francesa. Su actividad de estudio continuó durante varios años, obteniendo en 1793 una nueva licencia: “para que pueda tener y leer libros prohibidos por el Santo Oficio…”
En la Ilustración la actividad científica y cultural de la mujer todavía no era reconocida de pleno derecho. A pesar de ello, la Marquesa de Tolosa llevó a cabo proyectos de relevancia, como la traducción del francés al castellano de varios libros.
(PERALES DEL RÍO,C.25,D.61.)
(2-3) Recibo firmado por Goya por cuatro libros de “Caprichos” (1799) y libramientos dado por María Josefa Pimentel Téllez-Girón, XII Condesa-Duquesa de Benavente, para el pago de cuadros (1788)
Entre los tesoros que guarda el archivo de los duques de Osuna se conservan interesantes documentos cruzados entre Josefa Pimentel y varios artistas coetáneos de renombre, como Francisco de Goya y Agustín Esteve.
Existen abundantes libramientos de pago y recibos con los autógrafos de los citados artistas, por el encargo de diversos cuadros realizados para la Alameda, antigua villa situada cerca de la corte madrileña, donde los duques habían construido una casa para el descanso estival.
De los trabajos de Goya como pintor de la Casa de Osuna destaca el magnífico retrato de la condesa-duquesa vestida a la moda francesa, así como el retrato familiar del matrimonio con sus cuatro hijos conservado en el Museo del Prado. Capítulo aparte merece la delirante y satírica serie de los Caprichos, de los cuales los duques de Osuna compraron a Goya cuatro libros grabados al aguafuerte.
(OSUNA,CT.515,D.35)
(4) Diploma de la Academia Romana de Bellas Artes de San Lucas Evangelista concedido a la marquesa de Santa Cruz (1803)
María Ana de Waldstein fue una noble de origen austriaco que recabó en España en 1781, tras contraer matrimonio con José Joaquín de Silva Sarmiento Bazán, IX marqués de Santa Cruz.
Descendiente de la más reconocida aristocracia centroeuropea, su entorno social y familiar mantuvo siempre estrechos lazos con la cultura. La propia Mariana cultivó con cierto éxito la pintura, alcanzando el título de directora honoraria de pintura y académica de mérito de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. Participó en varias exposiciones de la citada Academia y se especializó en la miniatura, campo en el que fue reconocida internacionalmente.
En 1802, ya viuda, marchó a Italia, donde perfeccionó su técnica en las academias de Florencia y de San Lucas en Roma. A esta última institución pertenece este vistoso diploma concedido a la marquesa.
(SANTA CRUZ,C.41,D.144.)
(5) Recibo de Tomás de Iriarte por el pago de obras de Haydn para la orquesta de la condesa-duquesa de Benavente (1789)
Los duques de Osuna mantuvieron a lo largo de su vida una intensa labor de apoyo a las artes, las letras y las ciencias, patrocinando a artistas e intelectuales, y actuando como promotores de ópera y teatro. Sus residencias fueron importantes centros de reunión donde políticos, cortesanos y artistas participaban en tertulias y, especialmente, escuchaban música.
La condesa-duquesa de Benavente, duquesa consorte de Osuna, dedicó una parte de su archivo a la custodia de partituras, en la llamada “Papelera musical”. En ella se almacenaban obras únicas, producto de su mecenazgo, incluyendo composiciones de músicos extranjeros.
Franz Joseph Haydn fue un compositor austriaco que, junto a Mozart y Beethoven, suele considerarse uno de los máximo exponentes de la Escuela de Viena. María Josefa de Pimentel y Haydn mantuvieron una estrecha relación contractual, mediante la cual éste tenía que enviarle un mínimo de seis obras anuales, que la duquesa podía presentar en exclusiva al resto de España.
(OSUNA,CT.391,D.1.)
(6) Nómina de los integrantes de la orquesta de la condesa-duquesa de Benavente (1787)
Un gran número de instrumentistas, compositores y profesores de música y danza trabajaron para la Casa de Benavente. Su afición por la música y su política de patrocinio dio lugar a la llamada “orquesta de la condesa-duquesa”, formada por un selecto grupo de músicos. El título de director fue ostentado por el italiano Luigi Boccherini que, como vemos en este documento, recibía el importante salario de mil reales mensuales.
(OSUNA,CT.390,D.6.)