El Museo Sorolla de Madrid conserva el ambiente original de la vivienda y taller del pintor Joaquín Sorolla y Bastida (Valencia, 1863-Cercedilla, 1923). Custodia la más rica colección de sus obras, pinturas llenas de color que irradian luz y vitalidad. Es una de las casas de artista más completas y mejor conservadas de Europa, y su jardín, también diseñado por él, es un precioso oasis en la ciudad.
El Museo Sorolla aspira a promover al máximo el conocimiento y disfrute del legado de Joaquín Sorolla por todo tipo de públicos, en el convencimiento de que este legado, y en particular las obras de Joaquín Sorolla, puede ofrecerles una experiencia emocional y estética positiva y enriquecedora, estimular sus sentidos, avivar en ellos la conciencia del sentido de la vista como instrumento de conocimiento y animarlos a utilizar sus propias capacidades creativas.