Una de las preocupaciones de todo municipio es preservar la memoria local. La biblioteca pública es el punto de encuentro en el que confluyen estudiosos en busca de fuentes y personas interesadas en comprender mejor su entorno.
Cuando el CDD Trueba (Centro de Documentación y divulgación de las Encartaciones) organizó la exposición "Las batallas de Somorrostro, 1874 " (Entre febrero y abril de 1874 carlistas y liberales libran una batalla por Bilbao en el valle de Somorrostro. Tres meses que alteraron la vida cotidiana de Muskiz, modificando su paisaje, y tras la finalización de la guerra, toda la estructura socioeconómica de la zona. 1874 marca un antes y un después...olvidado por las nuevas generaciones) la biblioteca se implicó en la actividad y participó en el desarrollo de la misma.
Uno de los objetivos de la exposición era dar a conocer hechos muy importantes en el devenir de nuestra comunidad recuperando, manteniendo y difundiendo el patrimonio (tanto el material como el inmaterial). Curiosamente más que por las piezas expuestas la mayoría de los asistentes mostraban su fascinación al saber que el lugar donde vivían había sido escenario de unos sucesos tan señalados. Por un momento vieron con otros ojos lugares transitados a diario y nos preguntamos si la biblioteca sería capaz de ayudar a ver cosas importantes que ya no están...
En la biblioteca sabemos buscar las fuentes, conocemos a las personas interesadas en ellas y no somos ajenos al desarrollo tecnológico y sus nuevas posibilidades (poseemos un gran conocimiento de las nuevas tecnologías de la información y podemos ayudar a socializar su utilización). La colaboración con el CDD Trueba era el estímulo que necesitábamos para generar un nuevo contenido local acorde a la evolución de las necesidades de nuestra sociedad digital.
Gracias a esa colaboración hemos realizado un trabajo en diferentes frentes (localizar nuevas fuentes, facilitar el contacto entre investigadores, estimular la creación de nuevos contenidos, posibilitar un transvase de información entre los investigadores y el público, socializar el uso de la tecnología para mejorar los canales de difusión, utilizar diferentes soportes y lenguajes multimedia para recuperar, mantener y difundir el patrimonio local...) que nos ha permitido generar nuevos contenidos informacionales. En concreto hemos creado una aplicación de Realidad Aumentada que facilita entender los sucesos de 1874 utilizando una tecnología que mejora y enriquece la transmisión de esa realidad que sustentan los documentos que manejamos y los objetos que exhibimos en la exposición.
La aplicación creada por la biblioteca permite a cualquier persona que se acerque a Muskiz con un smartphone acercarse al hecho histórico de 1874 (mientras paseamos por el entorno el dispositivo nos dice donde se encuentran, con respecto a la situación geoespacial que en cada momento ocupemos, los items relacionados con aquel episodio y nos ofrece todo tipo de información relacionada: imágenes, textos, vídeos…). El usuario no solo recibe información, también decide qué quiere obtener y si lo va a reutilizar o no.
Las nuevas tecnologías de la información están cambiando las formas de acceso a la cultura. En este nuevo escenario la biblioteca puede ayudar a socializar el uso de las tecnologías mientras conserva, mantiene y difunde la memoria local.
Instituciones y/o centros colaboradores:
-Centro Documentación Trueba, Biblioteca de Muskiz