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La reproducción de los documentos que se custodian en los archivos es una de las tareas a las que se han venido dedicando los archiveros a lo largo de los tiempos. La digitalización es, ante todo, un procedimiento de conservación: permite obtener copias de resguardo, de manera que podamos conservar la información contenida en los documentos a pesar del inevitable deterioro de los soportes documentales en que está contenida, o en el caso de su desaparición por una eventual catástrofe. Permite también obtener copias de consulta minimizando el deterioro que supone la manipulación continua de los originales. Esta filosofía es la misma que motivó la elaboración de los tumbos y cartularios en la Edad Media, o los libros de copias que Felipe II ordenó realizar en las Ordenanzas del Archivo de Simancas de 1588 .
Además, gracias al desarrollo de internet, la digitalización ha adquirido una nueva dimensión convirtiéndose en el apoyo fundamental de las tareas de difusión, ya que facilita la accesibilidad universal de los fondos documentales a través del Portal de Archivos Estatales PARES .
El Archivo Histórico Nacional tiene una amplia experiencia en el desarrollo de proyectos de digitalización. Nuestros últimos proyectos:
Digitalización de los Mapas y Planos del Ministerio Ultramar