Extensión

Tras la colonización del Caribe, entre 1519 y 1540, se sientan las bases del Imperio Español en la América continental, expansión orientada hacia dos ámbitos geográficos: América Central y el sector andino de Sudamérica. Hernán Cortés dará el salto desde Cuba al Valle Central de México, ello supondrá el fin de la civilización azteca (1519-1522). El otro gran movimiento de conquista parte de Panamá hacia América Central y se centra en la actual Nicaragua (1523-1524) para dirigirse hacia el sur. Poco después, Pizarro en Perú (1531-1533) logrará el desplome del imperio Inca. Pedro de Valdivia se adentrará en Chile (1542) aunque no podrá superar la resistencia araucana y consolidar su posición en el sur del país. Desde el Atlántico, Pedro de Mendoza (Guadix, Granada, 1499-Océano Atlántico, 1537) intentará controlar la región de la Plata (1535-1536). La colonización del sur será lenta y queda paralizada en Paraguay hasta 1580.

También es en el siglo XVI cuando se produce el salto al Océano Pacífico incorporándose a los territorios de la Monarquía Hispánica las Islas Filipinas, Marianas y Carolinas.

Durante el siglo XVII, se produce una gran emigración europea al Nuevo Mundo. Llegan los jesuitas (1692) en su proceso de evangelización y se inicia la corriente migratoria inglesa hacia América del Norte (1607).

En el siglo XVIII, los dominios españoles siguen formando el más amplio de todos los imperios coloniales. En este siglo se producen una serie de expediciones por la costa americana del Pacífico en dirección al norte, llegando hasta la actual Alaska.

Es, en este siglo, cuando se concretan las rivalidades coloniales, ya que ingleses, franceses, españoles, portugueses y daneses se disputan las bases y zonas proveedoras de esclavos. Parte de los territorios americanos cambian de manos. Florida pasará a Inglaterra (1763) y, de nuevo, a España (1783); Luisiana pasará de Francia a España (1763); Sacramento pasará de Portugal a España (1750), regresará a Portugal (1763) y, finalmente, devuelta a España (1777); y la Banda Oriental, en manos portuguesas, pasará a España (1750).