El patrimonio bibliográfico de carácter histórico, que a principios del siglo pasado se denominaba tesoro bibliográfico, incluye materiales producidos, coleccionados o depositados en bibliotecas españolas de diferente titularidad. Los libros manuscritos o impresos se caracterizan por su doble naturaleza como registro de información, conocimiento y creación, y como objetos con valor artístico, antigüedad y singularidad. A la vez, este patrimonio desborda la definición de libro para abarcar otras muchas manifestaciones como las partituras, los registros sonoros o los grabados. Esta riqueza sólo puede ser protegida mediante su identificación y localización, su conocimiento y su estudio, ya que estas colecciones son especialmente vulnerables a la destrucción y el robo. Importantísimas, valiosísimas piezas cruzaron nuestras fronteras y ahora constituyen grandes colecciones de libros españoles en instituciones del extranjero.
El objetivo de proteger de la destrucción y el expolio las bibliotecas españolas está presente desde las primeras leyes orientadas a la preservación del patrimonio histórico. Éstas se concentraron en la creación del Catálogo Colectivo del Patrimonio Bibliográfico, conforme lo define la Ley de Patrimonio Histórico Español de 1985, cuya confección queda bajo la responsabilidad de la Dirección General de Bellas Artes. El Catálogo Colectivo del Patrimonio Bibliográfico, se elabora en cooperación con las comunidades y ciudades autónomas, recoge información de los fondos bibliográficos de biblioteca españolas, públicas o privadas. Su infraestructura técnica permite tanto su consulta como su alimentación en línea. Es una herramienta esencial para la investigación cultural e histórica. El Catálogo Colectivo sirve además de base a numerosos proyectos de diferentes instituciones, especialmente iniciativas de preservación, digitalización y difusión de sus colecciones.Salto de línea Salto de línea Ficha: 42/100 Unidad: Subdirección General de Coordinación Bibliotecaria.
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