Número de inventario: 15586. Teruel.
Arcilla. Alt. 12; diám. máx. 46,9 cm.
El motivo central presente en este lebrillo corresponde al de un animal irreal o fabuloso. Se trata efectivamente, de una figura monstruosa que, por sus atributos -pies y alas de águila, cola de reptil y cuerpo enteramente escamado- podría corresponder a la representación de un dragón. Sin embargo, este cuerpo, que se combina con una cabeza de mujer remitiría más concretamente a la figura de una arpía. Esta última, suele presentar cabeza y pecho de mujer, y el resto de ave, con sus alas y plumas. Durante la Edad Media, la presencia de este tipo de motivos fantásticos fue recurrente, siendo portadoras de mensajes altamente significativos en términos moralizantes cristianos.
Por otra parte, es necesario destacar que la presencia de animales irreales en la cerámica de Teruel no es aleatoria (ver pieza 15572) ya que esta se encuentra íntimamente relacionada con el origen mudéjar de esta producción. Esta idea de filiación con la tradición hispano-musulmana, se ve además reforzada por el paralelismo patente entre los motivos presentes en este tipo de loza y los de la techumbre mudéjar de la catedral de Teruel (M.ª I. Álvaro Zamora, 1987). En algunos casos, como en el de la figura de esta arpía, la similitud que mantiene con la que puede observarse en aquélla es casi absoluta.
Por último, como ocurre con las piezas 15557 y 15572, la presencia de este tipo de decoración en vasijas producidas durante el siglo XX, obedece al esfuerzo conjunto de historiadores, arqueólogos y ceramistas por recuperar de la extinción a algunas de las piezas representativas del momento de mayor esplendor de la cerámica de Teruel (M.ª E. Sánchez Sanz, 2002: 72). Este objetivo fue alcanzado mediante la reproducción tanto de piezas arqueológicas como de motivos presentes en la techumbre de la citada catedral.
LMM